Cómo fue fotografiar a Messi en New Jersey

Todos saben que mi amor incondicional por MARADONA es único en el mundo futbolístico. Lo admiré tanto de chico que de grande hasta quería su propia vida dentro y fuera de las canchas.

Cuando me enteré que la Selección Argentina de Fútbol llegaba a New Jersey para jugar contra Jamaica en el Red Bull Arena Stadium, sabía que se me iba a dar la oportunidad de conocer a MESSI face to face. Si bien, cuando vivía en Buenos Aires había hecho coberturas de la albiceleste previo al mundial de Brasil 2014, no había tenido la oportunidad de estar junto al 10. O al menos, no de tenerlo a medio metro como lo tuve en el Arena.

Esperé ansioso el martes 27 de agosto ( día del partido ). Me hacía cada película en mi cabeza. Me imaginaba a Messi dándome bola y no, también. Me imaginaba entrevistándolo y no, también. Me imaginaba acreditado para el partido y no, también. En este último caso no me quedaba otra que comprar la entrada. Era inevitable no hacerse la cabeza pensando en ese día.

Hasta que llegó el lunes 26 día en que arribó la selección al Estado Jardín procedente de Miami. Ahí habían goleado a Honduras 3-0 con dos goles de Messi. Estaba predestinado que en New Jersey la selección Argentina iba a volver a tener una fiesta de goles. Y lo digo con todo el respeto del mundo que se merece un país como Jamaica. Equipo que nunca fue rival dentro del campo de juego para la potente Argentina.

Al promediar las 20:30 fui a recibir a la selección al hotel de concentración y, ahí me encontré con 200 hinchas, todos eufóricos con la llegada del equipo argentino. Cuando el reloj marcó las 22: 50 llegó el bus con toda la tropa y la euforia se desató. Todo fue un descontrol. No habían vallas de seguridad, o al menos, NO como las que ponen en Sudamerica cuando llega alguna figura importante. Todo era fácil de vulnerar. Y es que en los Estados Unidos el respeto está primero. Uno sabe lo que puede y NO hacer. Transgredes las normas y chau, no hay tu tía. Marche preso ! Pero con 200 almas eufóricas no les quedó otra a los security que confiar en el buen comportamiento de los hinchas. Por suerte, todo salió bien y la mayoría pudo capturar el momento épico de ver descender del bus a Messi y a sus compañeros.

Yo no me había quedado muy satisfecho con ese momento porque la locura de la gente no me permitió grabar cómodamente. Necesitaba material para La Bola Sports ( @labolasportsok www.labolasports.com ), por eso había ido al hotel. La noticia es la noticia y en ese momento el titular de la portada era la llegada de Messi a New Jersey junto a la albiceleste. Mientras todo eso pasaba mi cabeza pensaba: » y pensar que mañana lo tendré frente a frente cuando el ex Barcelona esté sentado en el banco de suplentes «. Me hice de amigos ahí en el hotel que me contaban lo que habían hecho para llegar al hotel, pero a nadie le conté que estaba acreditado para el partido del día siguiente. Pude observar a padres junto a sus niños con camisetas, pelotas, banderas para que el 10 se las pueda firmar. Dentro de mi reflexionaba: esto es imposible. Primero porque no le va a dar tiempo a Messi de firmar tantos souvenirs y, segundo porque la seguridad no lo va a permitir. Cosa que sucedió, pero quién soy yo para quitarle la ilusión a la gente. Si hasta en un momento pensé llevar a mi hija al hotel de la selección, pero mi pequeña fue mas cuerda que yo y decidió no ir. Al menos, se evitó trasnochar, ese día volví a casa a las dos de la mañana.

Una vez que ingresaron los jugadores la hinchada y yo pensábamos que la «Pulga» y sus compañeros iban a saludar a la hinchada dentro del Lobby ( esa fue la promesa de una persona del cuerpo técnico argentino cuando pidió silencio., para que los jugadores puedan cenar tranquilos ), pero nunca sucedió. Dale clic al vídeo para ver el momento.

Al siguiente día y con acreditación en mano, llegué al Red Bull Arena Stadium. Fui tres horas antes porque quería vivir la previa total. Asado, mate, fernet y camisetas celeste y blanca se podían observar en cada rincón. Argentina era más local que nunca. Me crucé con algunos jamaiquinos, pero la fiesta era gaucha.

Ya dentro del campo de juego y con mi chaleco de fotógrafo otorgado por la organización del evento, no me quedaba otra que esperar la salida del equipo argentino. De pronto, salió él a hacer el calentamiento pre competitivo y tiré una ráfaga de fotos, pero después levanté mi mirada porque lo quería ver de cerca. Ya estaba, el momento había llegado. Tenía la instantánea, y ahora tenía 15 minutos para disparar cualquier movimiento de Messi dentro del campo de juego. A esa hora sabía que no iba ser de la partida, así que me esperaba otro momento épico cuando el 10 se sentara en el banco de suplentes. Y así sucedió.

Cuando el equipo titular salió al gramado del Red Bull Arena para disputar el partido contra Jamaica, Messi se sentó al lado de Rodrigo de Paul en el banco de suplentes y, todos los flashes se fueron con él. Eramos 15 fotógrafos a menos de dos metros del jugador del Paris Saint Germain intentando capturar la imagen que quedaría en la historia del balompié.

Estuve cerca del crack desde que se cantó el himno americano, jamaiquino y argentino. Todas las cámaras lo apuntaban a él. Pude percibir que se incomodó, pero mis compañeros no le sacaban el foco. En un momento dije en voz alta» Bueno, ya está. Its Ok, Ready «, pero seguían tomándole fotos. En un momento me crucé en medio de los fotógrafos y me fui a la esquina para tomarle unas pics a Enzo Fernández, Armani…, pero nadie me siguió. Todos seguían apuntado a Messi.

En medio del himno argentino, lo miré fijamente por varios segundos y pensaba en mis hijos que lo tienen como Idolo. Mi hija estaba en la tribuna y obviamente que pasaba por mi cabeza como no estoy aquí con ellos. Mis amigos me dijeron después de que vieron mi trabajo periodístico: » Si estuviste tan cerca de Messi por qué no le pediste una foto?». Y la respuesta siempre es la misma: » Voy por trabajo no a sacarme fotos «. Mi legado siempre ha sido no incomodar al jugador o a la persona pública con fotos o videos. Al menos, cuando estoy haciendo prensa.

El estadio se vino abajo cuando ingresó el crack albiceleste a los 65 minutos del segundo tiempo. Los hinchas vociferaban su nombre en cada rincón del estadio. Qué sentirán sus compañeros que toda la atención esté en la pulga y en ellos no tanto? En el fútbol juegan 22 jugadores y 11 de ellos pertenecen a un equipo. No lo olviden !

Messi clavó dos golazos, uno lo festejó cerca a mi cámara y el otro lo gritó cerca de la hinchada. Una noche soñada para toda mi pensadera en la antesala. Si estuve nervioso? Obvio, sino no hubiera podido capturar tantas imágenes del 10 con el balón. Los nervios son responsabilidad y disfrute.

Conclusión: Messi va a salir campeón del mundo con Argentina y deseo que sea así. Sin embargo, mi corazón maradoniano no va a cambiar por más que el uno del mundo del balompié levante la Copa del Mundo.

Conclusión 2: Messi con todo el poder del mundo que tiene se sintió vulnerado por los fotógrafos en New Jersey. Juro que fue así. Lo percibí así, y aunque nadie lo notó puedo dar fe de que fue así.

Conclusión 3: En un toque pensé: este tipo gana millones de dólares y yo a penas llego a fin de mes como muchas personas en el mundo, pero mi cámara fotográfica lo intimida a él y a mi me hace gigante. Responsabilidad que el tiempo me enseñó a controlar.

Conclusión 4: SOMOS SERES HUMANOS y no de otro planeta.